Modelo: Duretán SPO1N40
Color: Negro
El sellador de poliuretano es ideal para emboquillados, sellos perimetrales y sellos de láminas en techumbres, así como para juntas que requieran ser impermeables o herméticas.
Es útil para materiales lisos o porosos, como concreto, laminas metálicas, aluminio y muro.
Ventajas de Duretán:
- Cumple y excede los requerimientos de la norma ASTM C-920, clase 25, tipo NS.
- No mancha la piedra natural.
- Cuando vulcaniza puede estar en contacto con agua potable.
- Se adhiere a superficies porosas con lisas, sin necesidad de usar primer.
- Resiste el ataque de microorganismos.
- Se puede recubrir con impermeabilizantes o repellados una vez curado.
- No escurre en juntas verticales (ancho máximo de junta: 20 mm).
- Resiste a la humedad salina, intemperie y envejecimiento.
Especificaciones:
- Relación de curado: 1-2 mm/día.
- Capacidad de movimiento: +/- 25 por ciento.
- Temperatura de trabajo: -30°C a 70°C
- Temperatura de aplicacion: 5°C a 40°C
- Rendimiento: 7.75 m en juntas de 6 mm x 6 mm, con un 7 % de merma
- Caducidad: 12 meses, en un lugar fresco y seco.
- Densidad: 1.30-1.32 g/ml.
- Resistencia a la tensión: 12-15 kgf/cm2.
- Presentación: 300 ml.
Aplicación:
Las superficies a sellar deben ser firmes, estar secas, limpias, libres de polvo, grasas, aceites, agua y sellador viejo.
Realizar la limpieza de las superficies porosas con una brocha o aplicando aire a presión, para retirar todas las partículas sueltas.
En el caso de superficies lisas, se hace una limpieza con la técnica de dos paños que consiste en pasar sobre la superficie un trapo (que no desprenda pelusa) impregnado con alcohol isopropílico e inmediatamente retirar todas las impurezas con otro trapo seco y limpio.
Colocar un enmascarillado con cinta masking tape sobre las superficies para delimitar el área a sellar.
Aplique el sellador en forma de cordón sobre la superficie a sellar. Se debe dejar como mínimo una sección de 6 x 6 mm y como máximo 1 pulgada. Por último, se hará un repaso en sentido contrario a la aplicación con una espátula recta para que el sellador penetre lo necesario en la junta, para generar una mejor adhesión y romper las burbujas de aire que pueden quedar atrapadas durante la aplicación.
Al final retirar el enmascarillado desprendiendo en sentido opuesto a la aplicación con un movimiento continuo pero controlado. El excedente puede ser removido lo antes posible con un trapo humedecido con alcohol isopropílico.
Hecho en Europa